Entre las muchas y variadas actividades que llevan a cabo las Delegaciones locales, para cooperar con los proyectos de Delwende, la Delegación de Salamanca quiere compartir una que para nosotros está resultando de especial interés: el Mercadillo solidario que comenzamos el año pasado y del que llevamos ya la tercera edición. Este año, en dos fines de semana de primavera.
¿Cuál está siendo la clave de su éxito y la alegría que nos produce?:
- Las donaciones de muchas personas particulares de todo tipo de productos (ropa, complementos, menaje, cuadros, libros, objetos de ornamentación, jabón artesanal, vinos, embutidos, objetos del merchandising, etc.)
- El contar con un local en pleno centro de Salamanca, cedido por las Religiosas del Amor de Dios, que han tenido, además, todo tipo de detalles con nosotros.
- El esfuerzo inestimable de la Junta de Delwende y de los voluntarios de nuestro Centro social.
- Las visitas al Mercadillo de todo tipo de personas y de toda edad y condición, especialmente familias latinoamericanas residentes en la ciudad, que se benefician de buenos productos a precios muy económicos.
- La publicidad a través de carteles y redes sociales y el boca a boca que han contribuido a la difusión de este evento y a sus estupendos resultados.
- La impresionante corriente de solidaridad y empatía que lo envolvía todo. Mucha gente ha conocido nuestra ONG por este motivo y nos ha felicitado.
- Y un largo etcétera…
Imposible esta empresa sin el trabajo y la entrega incondicional de los miembros de la Junta local y los voluntarios y otras personas que han ofrecido su ayuda y que no han ahorrado tiempo ni esfuerzo para conseguir nuestros objetivos.
Nos alegra, además, saber que estamos contribuyendo con el medio ambiente al dar segunda vida a tanta ropa y objetos que hubiera ido directamente al reciclaje.
Merece la pena el esfuerzo, comentábamos todos el domingo por la noche, olvidándonos de nuestro propio cansancio. ¡Y ahora, a pensar en el próximo!
Gracias a Dios y a la buena gente que trabaja desinteresadamente para que los menos favorecidos, de cerca y de lejos, puedan vivir un poco mejor.
La Junta de Salamanca